Avanza el 2024 y es necesario saber que este año tendrá un día adicional para contabilizar 366 días al final de este período anual que se le conoce como bisiesto: así que febrero tendrá 29 días en vez de 28 como el año pasado.
Contar los días, meses y años, es una invención humana que trata de seguir los ciclos lunares (29,5 días entre lunas llenas), y ciclos solares (365,25 días) para que la Tierra gire alrededor del Sol.
El emperador Julio César, hace casi 2.000 años, impuso un calendario muy parecido al que usamos hoy en día: el llamado calendario juliano alternó los 12 meses con 30 y 31 días, exceptuando a febrero que dejó con 28 días o 29 días.
Para corregir el desfase del calendario juliano, el papa Gregorio XIII intercedió con su calendario en 1582.
➡️El calendario gregoriano es el estándar establecido en la mayoría del mundo, pero no todos los países lo adoptaron al mismo tiempo.
Primero fueron los que estaban alineados con la Iglesia Católica: en lugar de eliminar años bisiestos en las siguientes cuatro décadas, cortaron 10 días; saltaron del jueves 5 de octubre al viernes 14 de octubre de 1582.
Pero, ¿sabían que una vez hubo un 30 de febrero?
Todo ocurrió en Suecia en 1712: ese país no había adoptado el calendario gregoriano por lo que tenía un desfase de varios días.
En 1700 decidieron asumir el calendario que era utilizado por todo el mundo.
Ordenaron que se añadiera un día adicional al 29 de febrero, creando así por única vez en la historia desde las épocas de Julio César, el 30 de febrero.
Las personas que nacieron ese día en Suecia, jamás pudieron celebrar su cumpleaños en su aniversario real.