El Aeropuerto Internacional del Cibao, realizó un simulacro de accidente aéreo para cumplir con las normas de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), en un ejercicio diseñado para evaluar la respuesta ante situaciones de emergencia.
El escenario del simulacro consistió en un accidente en el que un avión sufrió la explosión de uno de sus neumáticos, lo que causó que los pilotos perdieran el control de la aeronave, saliéndose de la pista del lado izquierdo y quedando varados a unos 100 metros al noroeste del umbral de la pista 29,
produciéndose de inmediato un incendio en el motor #1 y el fuselaje, provocando el colapso del tren principal y daños considerables en el ala de la aeronave del mismo lado.
Durante el simulacro, se llevaron a cabo varias actividades, como sofocar el fuego, la evacuación de los pasajeros, la atención médica de los herido y la coordinación entre los distintos cuerpos de emergencia, como la Policía Nacional, los bomberos, la Defensa Civil y hospitales.
Los servicios de rescate y los equipos de primeros auxilios simularon la respuesta rápida para salvar vidas y minimizar
los daños, siguiendo protocolos estrictos.
Así mismo los colaboradores de los distintos departamentos de la terminal aérea cumplieron con su
tarjeta de acción en las distintas áreas para estos casos de emergencia.
En el simulacro participaron de manera activa, además de los bomberos y el CESAC, la Unidad Médica Aeroportuaria, Seguridad Privada, el departamento de Operaciones, Mantenimiento y representantes
de las líneas aéreas, Cruz Roja, Defensa Civil y el Comité de Emergencia.
Este tipo de simulacro es una práctica obligatoria y periódica para garantizar que tanto el personal del aeropuerto como los servicios de emergencia, bomberos, médicos y paramédicos, estén preparados para enfrentar situaciones críticas de manera eficiente.
El ejercicio no solo busca cumplir con las normativas internacionales, sino también mejorar las capacidades operativas y la coordinación entre las instituciones involucradas, lo que resulta fundamental para garantizar la seguridad de los pasajeros y la efectividad de las operaciones en
situaciones de emergencia reales.
Al culminar el simulacro los invitados participaron de un coctel que reunió a directivos, personal de
seguridad y representantes de diversas instituciones para analizar los resultados del simulacro y fortalecer las estrategias de respuesta ante situaciones de emergencia.